Deja de quejarte y empieza a liderar el cambio: Un blog para líderes
Según un estudio de la Universidad de Warwick, los empleados que trabajan en un ambiente negativo son un 31% menos productivos y tienen un 15% más de probabilidades de ausentarse del trabajo.*
Imagina que llegas a la oficina cada mañana con una sensación de pesadez en el estómago. Te encuentras con tus compañeros y solo escuchas quejas y lamentos sobre el trabajo, los jefes, los clientes… La negatividad te invade y te cuesta concentrarte en tus tareas. Te sientes desmotivado y sin energía.
Un día, decides que ya no puedes más. No quieres ser parte de ese ambiente tóxico. Decides cambiar tu actitud y convertirte en un líder del cambio.
¿Por qué vale la pena que te detengas, dejes la queja, y empieces la transformación hacia el liderazgo?:
- Las quejas son contagiosas: Cuando te quejas, estás enviando un mensaje negativo a las personas que te rodean. Esto puede afectar su estado de ánimo y su rendimiento laboral.
- Crean un ambiente tóxico: Un ambiente de trabajo donde las quejas son frecuentes es un ambiente tóxico. Este tipo de ambiente puede generar estrés, ansiedad y depresión entre los empleados.
- Desmotivan a los empleados: Cuando te quejas, estás desanimando a tus compañeros. Esto puede afectar su motivación y su compromiso con el trabajo.
- Obstaculizan el progreso: Las quejas no te llevan a ningún lado. De hecho, solo te impiden avanzar y alcanzar tus objetivos.
- Afectan tu salud mental y física: El estrés y la ansiedad que generan las quejas pueden tener un impacto negativo en tu salud mental y física.
Consejos para lograr el cambio desde el liderazgo:
1. Cambia tu perspectiva:
El primer paso para dejar de quejarte es cambiar tu perspectiva. En lugar de centrarte en lo negativo, concéntrate en lo que puedes controlar y en las posibilidades de mejora. Recuerda que siempre tienes el poder de elegir cómo reaccionas ante las situaciones.
- Haz una lista de las cosas que te molestan en el trabajo.
- Identifica las cosas que puedes controlar y las que no.
- Enfócate en las cosas que puedes controlar y busca soluciones.
2. Enfócate en las soluciones:
En lugar de quejarte de los problemas, busca soluciones. Cuestiona el status quo y propone ideas creativas para mejorar las cosas. Colabora con tus compañeros y superiores para encontrar soluciones que beneficien a todos.
- Haz una lluvia de ideas de posibles soluciones.
- Evalúa las diferentes opciones y elige la mejor.
- Toma medidas para implementar la solución.
3. Sé un ejemplo a seguir:
Las personas se inspiran en los líderes que predican con el ejemplo. Si quieres que tu equipo deje de quejarse, demuéstrales cómo se hace siendo positivo y proactivo. Mantén una actitud optimista incluso en los momentos difíciles y enfócate en encontrar soluciones.
- Sé positivo y entusiasta.
- Enfócate en lo bueno.
- Ofrece ayuda y apoyo a tus compañeros.
4. Comunícate de manera efectiva:
Si tienes una queja legítima, comunícala de manera constructiva y respetuosa. Evita los ataques personales y el lenguaje negativo. En cambio, céntrate en los hechos y propone soluciones.
- Elige el momento y el lugar adecuados para hablar.
- Expresa tu queja de manera clara y concisa.
- Mantén un tono de voz calmado y profesional.
- Propón soluciones constructivas.
5. Reconoce el progreso:
Es importante celebrar los logros, grandes y pequeños. Reconocer el progreso te ayudará a mantenerte motivado y te dará la energía para seguir adelante.
- Celebra los éxitos de tu equipo.
- Reconoce el esfuerzo individual.
- Recompensa los logros.
¿Estás listo para dejar de quejarte y empezar a liderar el cambio? Inscríbete a la Master class gratuita “¡Empodérate y empodera a tu equipo con las destrezas del líder coach!” y recibe como obsequio “La Evaluación Autobiográfica” para desarrollar tus habilidades de liderazgo. ¡Te esperamos el 05 de junio a las 6 p. m., inscripción previa!
Respuestas